Showing posts with label Articulos. Show all posts
Showing posts with label Articulos. Show all posts

Thursday, July 22, 2010

"En Busca del Gozo" Por John Piper

En busca del gozo

Seis verdades bíblicas

¿Sabía usted que Dios nos ordena que seamos felices?

“Deléitate asimismo en Jehová, y él te concederá las peticiones de tu corazón.” (Salmo 37.4)

1) Dios nos creó para su gloria

“ Trae de lejos mis hijos, y mis hijas de los confines de la tierra […]; para gloria mía los he creado.” (Isaías 43.6-7)

Dios nos creó para magnificar su grandeza, al igual que un telescopio magnifica las estrellas. Nos creó para poner de manifiesto su bondad y verdad, su hermosura y sabiduría y justicia. La gloria de Dios se manifiesta en grado máximo cuando nos deleitamos profundamente en todo lo que él es. Así, Dios recibe la alabanza, y nosotros el placer. Dios nos creó de tal forma que cuanto más nos satisfacemos nosotros en Él, más se glorifica Él en nosotros.

2) Todo ser humano debería vivir para la gloria de Dios

“ Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios. (1 Corintios 10.31)

Si Dios nos creó para su gloria, está claro que deberíamos vivir para glorificarlo. Éste es nuestro deber porque fuimos diseñados precisamente con ese propósito. Así que, nuestra primera obligación es mostrar el valor de Dios sintiéndonos satisfechos con todo lo que él es para nosotros. En esta satisfacción se encuentra la esencia del amor a Dios (Mateo 22.37) y de la confianza (1 Juan 5.3-4) y el agradecimiento a él (Salmos 100.2-4). Ésa es la raíz de toda verdadera obediencia, especialmente del amor hacia los demás (Colosenses 1.4-5).

3) Ninguno de nosotros ha glorificado a Dios como debería

“Todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios.”(Romanos 3.23)

¿Qué significa “estar destituido de la gloria de Dios”? Significa que ninguno de nosotros ha confiado en Dios ni lo ha valorado como debería. No nos hemos quedado satisfechos con su grandeza ni hemos andado en sus caminos. Hemos buscado nuestra satisfacción en otras cosas a las cuales hemos dado más valor que a Dios, y ésta es la esencia de la idolatría (Romanos 1.21-23). Desde que entró el pecado en el mundo, todos hemos sido profundamente reacios a tener a Dios como el tesoro que nos satisface por completo (Efesios 2.3), lo cual es una terrible ofensa a la grandeza de Dios (Jeremías 2.12-13).

4) Todos nosotros estamos sujetos a la condenación justa de Dios

“La paga del pecado es muerte...” (Romanos 6.23)

Todos hemos menospreciado la gloria de Dios. ¿De qué manera? Prefiriendo otras cosas antes que a él. Siendo ingratos, desconfiados y desobedientes. Por lo tanto, Dios nos trata con justicia cuando nos niega el placer de su gloria para la eternidad.Sufrirán pena de eterna perdición, excluidos de la presencia del Señor y de la gloria de su poder (2 Tesalonicenses 1.9).

La palabra “infierno” aparece en el Nuevo Testamento en doce ocasiones, y en once de ellas, es Jesús mismo quien la usa. No se trata, pues, de un mito creado por predicadores taciturnos y llenos de ira. Es un aviso solemne de parte del Hijo de Dios, quien murió para rescatar a los pecadores de la condenación eterna. Corremos un gran peligro al ignorarlo.

Si la Biblia acabara aquí su análisis de la condición humana, estaríamos condenados a un futuro sin esperanza. Sin embargo, hay más...

5) Dios mandó a su único Hijo, Jesús, para que podamos tener vida eterna y gozo

“Palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores..." (1 Timoteo 1.15)

Las buenas nuevas son que Cristo murió por pecadores como nosotros, y resucitó físicamente para validar el poder salvador de su muerte y para abrir las puertas de la vida eterna y del gozo (1 Corintios 15.20). Es decir, Dios puede absolver a los pecadores culpables y seguir siendo considerado justo (Romanos 3.25-26).Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios (1 Pedro 3.18). De la reconciliación con Dios es de donde surge toda satisfacción profunda y duradera.

6) Los beneficios comprados por la muerte de Cristo les pertenecen a los que se arrepienten y confían en él

“Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados” (Hechos 3.19). “Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo”(Hechos 16.31).

“Arrepentirse” significa rechazar todas las promesas engañosas del pecado. “Fe” significa estar satisfecho con todo lo que Dios promete ser para nosotros en Jesús. El que en mí cree, dice Jesús, no tendrá sed jamás(Juan 6.35). No nos ganamos la salvación; no podemos merecerla (Romanos 4.4-5). La recibimos por gracia, por medio de la fe (Efesios 2.8-9); es un regalo gratuito (Romanos 3.24). La tendremos si la valoramos sobre todas las cosas (Mateo 13.44). Cuando así lo hacemos, se cumple el propósito de Dios para la creación: Él se glorifica en nosotros y nosotros nos satisfacemos en él, para siempre.

¿Le parece que lo que le decimos tiene sentido?

¿Le gustaría tener el tipo de felicidad que se experimenta al sentirse satisfecho con todo lo que Dios es para usted en Jesús? Si es así, entonces Dios está obrando en su vida.

¿Qué debería hacer usted?

Deje de confiar en las promesas engañosas del pecado. Clame a Jesús para que le salve de la culpa, el castigo y la esclavitud.Todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo(Romanos 10.13). Empiece a depositar su confianza en todo lo que Dios es para usted en Jesucristo. Rompa el poder de las promesas del pecado por su fe en la satisfacción superior de las promesas de Dios. Empiece a leer la Biblia para encontrar sus preciosas y grandiosas promesas, que le pueden liberar (2 Pedro 1.3-4). Encuentre una iglesia cimentada en las verdades bíblicas y empiece a adorar a Dios y a crecer junto a otras personas que valoran a Cristo por encima de todas las cosas (Filipenses 3.7).

La mejor noticia del mundo es que no tiene que haber ningún conflicto entre nuestra felicidad y la santidad de Dios. Satisfacernos con todo lo que es Dios para nosotros en Jesús lo magnifica como un gran Tesoro.

“ Me mostrarás la senda de la vida; en tu presencia hay plenitud de gozo; delicias a tu diestra para siempre.” (Salmo 16.11)

"La Puerta Que Ya Dios Abrió" Por Bob Kauflin

Si eres como yo, probablemente has dado gracias muchas veces a Dios por personas como Matt Redman, Tim Hughes, Paul Baloche, Chris Tomlin, y otros cuyos ministerios y canciones han impactado tu vida y han servido a la iglesia en todo el mundo. Pero...


si eres como yo, probablemente también has pensado que Dios pudiera estar llamándote a TI a tener ese tipo de influencia. Te puedes ver a tí mismo llendo de gira, liderando miles de noches tras noches en poderosa, transformadora, gloriosa adoración. Que gran contribución pudieras hacer al reino, si tan sólo Dios habriera las puertas!


El problema es, que para muchos de nosotros, Dios ya abrió las puertas. Y estas puertas van directo a nuestra iglesia local.


Durante los pasados treinta años he liderado adoración en una gran variedad de contextos, grandes y pequeños. En las salas de una casa, en auditorios, en centros cívicos, en festivales al aire libre. Cada una de esas veces ha sido un inmenso privilegio. Estoy agradecido de que Dios usa eventos de todos los tamaños y formas para traer gloria a su nombre.


Sin embargo, nada se compara al privilegio de liderar a mi iglesia local a cantar en alabanza a Dios cada Domingo por la mañana.


Las Escrituras describen a la iglesia como “el edificio” de Dios, “el templo” de Dios, “el cuerpo” de Cristo, “la familia” de Dios. Somos “como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual para un sacerdocio santo” (1 Cor. 3:9b; Ef. 2:21-22; 1 Cor. 12:2; Ef. 2:19; 1 Pe. 2:5).


Podemos aplicar todas esas metáforas a la iglesia universal. Pero su más inmediata y práctica aplicación es a una iglesia local—los Cristianos con los que vivo día tras día, semana tras semana, año tras año.


Los Domingos, estoy haciendo más que liderar personas a una “experiencia de adoración” individual, por más poderosas que estas pudieras ser. Dios quiere unir el material que compone nuestras vidas, juntos como una comunidad adoradora. El quiere que nuestro canto los Domingos sea una expresión de nuestras vidas compartidas durante la semana.


Como hacemos para desarrollar un corazón para servir a nuestra iglesia local y resistir la tentación de estar insatisfechos? Aquí escribo algunas ideas.


Busquemos ser fieles en vez de ser famosos.

Una de las más grandes sorpresas en el cielo será ver a Dios otorgar las mejores recompensas a personas cuyos nombres nosotros nunca conocimos. Individuos que trabajaron año tras año en oscuridad, en una iglesia desconocida en un pueblo desconocido. Pero eran conocidos por Dios. Y al final, eso es lo único que importa. Dios está buscando siervos, no estrellas.


Entendamos los beneficios de las congregaciones por encima de los conciertos.

Los conciertos pueden tener gran valor. Pero duran sólo una noche. Las personas se reunen y se van, para nunca volver a verse. Una congregación se reune repetidamente, semana tras semana, año tras año. La oportunidad de enseñar, pastorear, animar, y construir vidas juntos sobrepasa por mucho lo que sucede una sola noche en un concierto.


Reconozcamos que Jesús vino a construir una iglesia adoradora, no una industria de adoración.

Una vez escuché a Louie Giglio decir que el centro de la palabra “Industry” es “dust”, que en inglés significa “polvo”. Esto nos recuerda que aunque Dios mismo levanta algunas bandas y artistas para bendecir a la iglesia con sus canciones, ninguno de ellos es escencial para sus propósitos. La iglesia lo es. Estamos muy equivocados si queremos hacer primordial aquello que Dios entiende que es secundario.


Se lo mejor que puedas ser, en el lugar donde Dios te ha llamado.

Prov. 22:29 dice, “¿Has visto un hombre diestro en su trabajo? Estará delante de los reyes; no estará delante de hombres sin importancia.” Esto no es una garantía de que Dios te hará famoso si practicas tu instrumento. Sino que es un enunciado claro de que no deberíamos esperar hasta que tengamos una gran audiencia para desarrollar nuestros dones.


Mientras buscamos complacer a la Unica Audiencia podemos confiar en que la plataforma desde la cual dirigimos será exactamente del tamaño adecuado para darle a Jesús la alabanza que El desea y que sólo El merece.


Bob Kauflin es el director de desarrollo de adoración para Sovereign Grace, en Gaithersburg, Maryland, USA. Su trabajo involucra la supervisión de sus projectos musicales y enseñanza en adoración congregacional. Bob escribió el fantástico libro “Worship Matters”, que en español significa “La Adoración Importa”; el cual en la opinión de Tim Hughes es uno de los mejores libros que se han escrito sobre adoración. Bob y su esposa Julie tienen seis hijos y un gran número de nietos que sigue creciendo. Encuentras más sobre esto en www.worshipmatters.com